Cada vez que quiero escribir
Siento que las palabras y mis pensamientos confluyen
Y se plasman en una hoja de papel
Sin orden sin fines en particular más que el de solo decir algo
Mas que el de solo expresar, no sé que en realidad
Cada vez que quiero escribir evoco a alguien sin rostro, tan solo una sombra en mi mente, un sueño, una fantasía, evoco a alguien que muy dentro de mi existe
Evoco a la materialización de mi tristeza y de mi soledad
Evoco a mi vida sola pero feliz
Evoco a aquellos que, de una manera u otra, se sienten identificados
Con la sarta de estupideces que escribo
Evoco a mi vida pasada y la esperanza que aun guardo acerca de mi vida futura,
evoco experiencias, momentos, aromas, sabores
Mi memoria se basa en mis sentidos y mi intuición se basa en
algo que a veces me cuesta explicar
A veces la persona que esta encerrada dentro de mí quiere salir
Es una dama sin mucha consecuencia ya que solo sabe sentir
Una persona que se conmueve con poco y que llora por nada a veces
Una mujer que vive entre contradicciones una compleja alma que
en silencio logra salir solo cuando la racional Alexandra se
da el tiempo de escribir, que sale a la luz a veces en este blog,
mi lado B mi alma atormentada que amo por sobre todas las cosas, pero que por motivos de cordura a veces debe estar encerrada.
Me permití mostrarla ahora pero creo que a veces sale sin que la llamen,
me permito ahora presentarles a mi lado B,
mi verdadera personalidad que a veces dice cosas sin mucha poética.
Porque no piensa, porque no razona, porque solo siente,
porque su existencia se basa en ello…
En guardar experiencias en hojas de papel y dejarlas bajo la cama,
en guardar en una gran despensa los malos momentos
En dejar en el refrigerador, de su casa dentro de mi, cada bella aventura que ha vivido
aunque a veces solo provengan de un fugaz momento de ocio de la persona racional que esta frente a la sociedad.
La Alexandra que convive con la sociedad de esta ciudad que odia
Pero que mi lado B disfruta hasta con el más leve soplido de la brisa cuando anochece
La princesa, la amante cautiva, la mujer entregada que fue puesta en cuidados intensivos en el hospital de mi mente para que nadie nunca vuelva a lastimarla.
La dama que disfruta cada momento, cada hoja de otoño que cae,
La que vuela con su imaginación, la que es capaz de crear un mundo de rosas negras y azules en el jardín de su corazón.
La que llora sangre por culpa de la decepción
La que bebe las lágrimas de la frustración.
La que carga con la culpa del fracaso pero que a pesar de ello quiere darse
la oportunidad de confiar, de ser feliz,
Aunque aun no ha logrado convencer a la Alexandra que esta afuera.
Aquella que le da la cara al mundo, aquella que debe hacer frente a los reproches
Aquella que ya se abstiene de soñar, aquella que se convirtió en dos hace ya algún tiempo…
Siento que las palabras y mis pensamientos confluyen
Y se plasman en una hoja de papel
Sin orden sin fines en particular más que el de solo decir algo
Mas que el de solo expresar, no sé que en realidad
Cada vez que quiero escribir evoco a alguien sin rostro, tan solo una sombra en mi mente, un sueño, una fantasía, evoco a alguien que muy dentro de mi existe
Evoco a la materialización de mi tristeza y de mi soledad
Evoco a mi vida sola pero feliz
Evoco a aquellos que, de una manera u otra, se sienten identificados
Con la sarta de estupideces que escribo
Evoco a mi vida pasada y la esperanza que aun guardo acerca de mi vida futura,
evoco experiencias, momentos, aromas, sabores
Mi memoria se basa en mis sentidos y mi intuición se basa en
algo que a veces me cuesta explicar
A veces la persona que esta encerrada dentro de mí quiere salir
Es una dama sin mucha consecuencia ya que solo sabe sentir
Una persona que se conmueve con poco y que llora por nada a veces
Una mujer que vive entre contradicciones una compleja alma que
en silencio logra salir solo cuando la racional Alexandra se
da el tiempo de escribir, que sale a la luz a veces en este blog,
mi lado B mi alma atormentada que amo por sobre todas las cosas, pero que por motivos de cordura a veces debe estar encerrada.
Me permití mostrarla ahora pero creo que a veces sale sin que la llamen,
me permito ahora presentarles a mi lado B,
mi verdadera personalidad que a veces dice cosas sin mucha poética.
Porque no piensa, porque no razona, porque solo siente,
porque su existencia se basa en ello…
En guardar experiencias en hojas de papel y dejarlas bajo la cama,
en guardar en una gran despensa los malos momentos
En dejar en el refrigerador, de su casa dentro de mi, cada bella aventura que ha vivido
aunque a veces solo provengan de un fugaz momento de ocio de la persona racional que esta frente a la sociedad.
La Alexandra que convive con la sociedad de esta ciudad que odia
Pero que mi lado B disfruta hasta con el más leve soplido de la brisa cuando anochece
La princesa, la amante cautiva, la mujer entregada que fue puesta en cuidados intensivos en el hospital de mi mente para que nadie nunca vuelva a lastimarla.
La dama que disfruta cada momento, cada hoja de otoño que cae,
La que vuela con su imaginación, la que es capaz de crear un mundo de rosas negras y azules en el jardín de su corazón.
La que llora sangre por culpa de la decepción
La que bebe las lágrimas de la frustración.
La que carga con la culpa del fracaso pero que a pesar de ello quiere darse
la oportunidad de confiar, de ser feliz,
Aunque aun no ha logrado convencer a la Alexandra que esta afuera.
Aquella que le da la cara al mundo, aquella que debe hacer frente a los reproches
Aquella que ya se abstiene de soñar, aquella que se convirtió en dos hace ya algún tiempo…
